sábado, 3 de diciembre de 2022

VI

“Un triste momento”

Diario del artista



El 25 de noviembre de 2022, escribí en Facebook, mi nota: "Un triste momento", cuando se me daño una acuarela.

Por supuesto recibí muchas respuestas con sugerencias de lo que tenía que hacer a partir de ese momento. Algunos decían que empezara otra de inmediato, que lo borrara, que lo dejara así, que aprovechara el error, y varios consejos más. 

Incluso muchas personas se hicieron "un juicio" de cómo me sentiría, que no me amargara, que no abandonara la pintura, que esas cosas pasan y no tenía que sentirme frustrado, y hasta apareció aquel que me preguntó el porqué había una copa de vino.

Por supuesto que no respondí a todos los comentarios, de hecho casi a ninguno de esos. Yo borré el daño y continué con la acuarela, no me frustré, no me amargué y la copa de vino estaba ahí porque a mi me había dado la gana de tomármela mientras pintaba.

Mi punto con este comentarios antes de ponerles lo que escribí, es "la necesidad" de algunas personas de dar consejos que no han sido solicitados, y mucho más que eso, de suponer el estado de ánimo de personas que no conocen, tan sólo por lo que les sucedió, y a partir de su propia vida; y esto me lleva a pensar en el siguiente capítulo, que tiene que ver con el ego de los artistas, y el cuidado que tenemos que tener antes de criticar o comentar sobre una obra terminada, o de un trabajo sobre el cual no han pedido tu opinión.

"Un triste momento"

Estar a unos 20 minutos de terminar una acuarela que has trabajado por dias, y de pronto… un pincel cargado de pigmento se escapa de la mano y vuela por el aire… 

Toda suerte de movimientos para tratar de atajarlo, casi en cámara lenta, baja muy despacio, choca con los dedos sin dejarse agarrar, se estrella contra el papel de algodón de 300 gramos, ante nuestra mirada impotente; y al chocar, sin mayor vergüenza o arrepentimiento, rueda sobre lo pintado, dejando lágrimas de hermoso color, a su paso. 

Y ahí empieza el caos… 

Quitar de la mesa el agua, la paleta y la copa de vino, para no cometer otro error, buscar un pincel limpio, correr por agua muy cristalina en otro recipiente, una servilleta nueva y la esponja de borrar, y tratar de eliminar todo lo dejado…. 

Y el resultado final?… a ratos se salva, otras veces se firma con el pequeño error, y otras… ni modo, al triturador del papel. 

Buenas noches. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

 XIV “Aprendiendo de mí mismo” Diario del artista Recientemente decidí tomar varias acuarelas abstractas, que no me gustaban, y de colores f...